Este año no voy a escatimar en gastos. Lo mejor para los míos. Además si los demás lo
hacen… que cojones; yo también. Voy a cortar el abeto más grande que vea, para
plantarlo en el jardinillo de la casa. Y lo voy a llenar de luces de esas de
los chinos, empalmaré tres o cuatro juegos, para que se vea en todo el barrio.
Un papa Noel de los que suben por las escaleras en cada ventana de casa. De los
reyes magos paso, que son inmigrantes, jajajajaja.
De la cena familiar me encargo yo, bueno, menos cocinarla. Llevaré
el mejor cava, jamón y marisco. Aunque sobre más de la mitad y lo tengamos que
tirar. Que no se diga! Un par de cajas de vino, que sea el gran reserva de la
cooperativa del pueblo. Un montón de turrones y dulces variados. No hay fiesta
sin borrachera y comilona ¡¡¡¡
Este año los regalos
van a ser más que excelentes. Para mis padres un viaje en un crucero por lo
menos; que se lo merecen. A mis hermanos una cámara de video, pero de las
buenas, no como la suya; un libro electrónico a ver si aprende a leer; y a ella el abriguito que siempre ha deseado de
pieles. Y no te cuento a los sobrinos, una consola diferente a cada uno. Este
año no nos darán guerra y jugamos la partidilla como Dios manda. Al tontorrón
de mi cuñado una ipack con wasapp para que hable con alguien aunque sea en
navidad. A mi sobrina predilecta una gargantilla de oro blanco. Y como no pisa
por casa desde que discutió con su madre, la puede lucir bien. Todos los amigos
van a recibir mi mensaje cachondo navideño. Por cierto; a ver si este año se
comporta mi cuñada, que el año pasado no le dejaba mamarse en paz a su santo
marido. Hay que joderse como es! Además, mi mujer y yo vamos a ser la envidia
con los modelitos que nos vamos a comprar de trajes. Hasta me voy a portar con
los suegros y les voy a regalar una televisión plana para que vean a lo grande las campanadas. Estas navidades
no es necesario hasta Reyes y por obligación pasar a felicitar la pascua.
Petardos, petardos… los más gordos, aunque nos revienten la
mano. Pero el vecino no duerme hasta que se acabe la Nochevieja. Que me ha
contado mi amiguete, que este es el primer año libra de currar. De los que son mas grande que mi mano, que
este año reventamos la botella de champan con uno. Y después… al cotillón del
casino, por supuesto el más caro. 250 euros por 4 horas de barra libre y canapés
ole, ole!!
Eso es mi espíritu navideño y no tonterías. Y de villancicos
ni uno, este año no me van a joder. Todo el día la tele puesta, pero no los anuncios
esos de pobres que piden, solo las galas musicales repetidas.
Y como único deseo,
que me toque la lotería, que si no como pago todo lo que he tirado de tarjeta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario