Realmente no se donde iré, pero si sé, que alcanzaré mi sitio, el
mismo donde os esperaré. Sentiré como el tiempo no hace mella en mí. Donde todo
lo buscado, lo encontraré. No habrá medidas que controlen los sentimientos.
Tampoco se regirá por juicios morales; pues las utopías serán la única ley; así
ninguna jerarquía dominará el infinito.
Que sepan mis padres, que no tendría palabras de agradecimiento.
Pues todas sus enseñanzas, valores y su cariño lleno de bondad son la persona
que hay en mí. A mis hermanos decirles que estén igual orgullosos de mi, como yo lo estoy de ellos,
pues no se puede compartir mas confianza. Habéis ofrecido día a día toda la
deseada. Y mis amigos creadores y partícipes de sueños recordarles que su incondicional honestidad ha sido mi verdad.
Cariño, si ayer fuera la última vez que nos viéramos, no lo
cambiaría ni por un millón de vidas sin sentir tu presencia. Ten claro, “verte
feliz es lo más importante”, tomes el camino que tomes. Te he apoyado en tus
decisiones y seguiré haciéndolo donde esté, pues no voy a dejar de cuidarte. Disfruta
tu libertad pues siempre hay esperanza.
No tengo reproches para nadie, y aunque en un mínimo espacio de
tiempo sentí el odio, nunca ha venido acompañado del rencor.
Pero mientras este aquí, y los secretos de la humanidad no me sean
revelados… otorguemos sonrisas, paz, ganar de vivir, quimeras compartidas,
detalles, amor y deseos…¡¡Y busquémoslos!!
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